Un Viaje Teatral al París de Alfonso Reyes

Este domingo 25 de mayo, el Teatro de la Ciudad abrirá sus puertas para transportar al público a la vibrante atmósfera cultural del París de los años 20 con “París 1925: una tertulia con Alfonso Reyes”, un espectáculo que combina teatro, música y poesía para revivir las legendarias reuniones intelectuales del célebre escritor y diplomático mexicano.

Hace exactamente un siglo, Alfonso Reyes asumió la Embajada de México en Francia, dejando un legado diplomático y cultural que incluyó el Tratado de Comercio y Amistad entre ambos países. Pero más allá de su labor política, Reyes se convirtió en un puente entre México y Europa, organizando tertulias donde confluían artistas, pensadores y personalidades de diversas nacionalidades.

En esta producción de Escena CONARTE, en colaboración con el Consulado de Francia en Monterrey y el IFAL, el público podrá sumergirse en una recreación íntima de aquellas veladas parisinas. Con un formato innovador, la obra se desarrollará directamente sobre el escenario, permitiendo una interacción cercana entre los asistentes y los actores.

Ricardo Marcos, Secretario Técnico de CONARTE, destacó que el montaje es un homenaje al “Regiomontano Universal” en el marco del 30 aniversario del organismo. “Es un viaje escénico que nos acerca a Alfonso Reyes en su faceta más humana e intelectual, con una propuesta que integra teatro, música y diálogo”, explicó.

El elenco, dirigido por Antonio Craviotto —quien también interpreta a Reyes—, incluye a talentos locales como Bruno Sangar, Rocío Tamez y Manuel Muñoz. El guion, escrito por Ricardo Cosma, rescata el espíritu de una época dorada, mientras que la producción de Francisco de Luna asegura una experiencia envolvente.

Con funciones a las 18:00 y 20:00 horas, cada sesión estará limitada a 70 espectadores, garantizando un ambiente íntimo y participativo. Los boletos, con precios de $100 y $150, ya están disponibles en AREMA Ticket y en la taquilla del teatro una hora antes del evento.

Esta obra no solo celebra el legado de Alfonso Reyes, sino que invita al público a ser parte de un diálogo atemporal entre arte, historia y diplomacia. Una oportunidad única para vivir, aunque sea por una noche, el esplendor cultural del París de entreguerras.