Más de 14 mil personas vibraron con las Noches de Verano en MARCO
La tercera edición de Noches de Verano MARCO concluyó con éxito, reuniendo a más de 14 mil asistentes durante los miércoles de julio, en un evento que fusionó música, arte y comunidad en el corazón de la ciudad.
Un Museo que se Transforma en Escenario
Bajo la dirección de Taiyana Pimentel, el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey (MARCO) rompió con la tradicional solemnidad de los recintos culturales para convertirse en un espacio de fiesta y expresión.
“Buscamos deconstruir la idea del museo como un mausoleo. Queremos que sea un lugar participativo, donde todos se sientan bienvenidos”, destacó Pimentel, quien celebró el récord de asistencia y la diversidad de públicos atraídos.
El Gran Cierre: Gil Cerezo & Friends
La última noche estuvo a cargo de Gil Cerezo, vocalista de Kinky, quien junto a artistas invitados como Leandro Ríos, Jonaz (Plastilina Mosh) y César Pliego (Kinky), ofreció un concierto ecléctico con mezclas de norteña, reggaetón, pop y electrónica.
“MARCO es mi segunda casa. Aquí descubrí el arte que inspiró mi música, y quiero que los jóvenes vivan lo mismo”, compartió Cerezo, quien ambientó el escenario como una sala de fiestas íntima.
Cartelera Musical y Sorpresas
El ciclo arrancó el 2 de julio con el DJ Orlando Fernández y cerró con broche de oro el 30 de julio. Entre los highlights:
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Nota Culichi, la Reina del Perreo Norteño, fusionó cumbia y reggaetón.
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Ghetto Kids llevó su energía internacional con ritmos de dembow.
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Poniboy y Suxxy (desde Austin) revivieron éxitos pop en formato karaoke.
Además, las visitas guiadas a exposiciones como “Oscar Murillo: Espíritus en el pantano” integraron arte y entretenimiento.
Inclusión y Futuro
Artistas como Alejandro Estrada (Ghetto Kids) resaltaron el espíritu inclusivo:
“Aquí no importa de dónde vengas: el arte y la música son para todos”.
Para 2026, MARCO adelantó que el evento se realizará en junio, coincidiendo con la Copa Mundial de la FIFA 26 en Monterrey, prometiendo una edición aún más grande.
Las Noches de Verano reafirman a MARCO como un espacio vivo, donde el arte se disfruta sin barreras. Una fiesta que, más que convocar multitudes, construye comunidad.
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