Nuevo León va durísimo contra la contaminación: “Iremos durísimo contra infractores”
El gobernador Samuel García Sepúlveda lanzó un contundente mensaje: Nuevo León no tolerará más delitos ambientales. Durante la firma del Decreto de Ley de Protección y Bienestar Animal, el mandatario estatal advirtió que su administración actuará con firmeza contra quienes dañen el medio ambiente, desde empresas contaminantes hasta vándalos urbanos.
Cero impunidad: cárcel para contaminadores
García Sepúlveda anunció que, en julio, entrará en operaciones la nueva División Ambiental de Fuerza Civil, un cuerpo especializado de 500 elementos y 100 patrullas dedicado a perseguir delitos ecológicos. Esta unidad trabajará en coordinación con la Fiscalía Ambiental para garantizar sanciones ejemplares.
“Vamos a ir durísimo, y quien se meta con un animal, quien contamine, va a la cárcel”, afirmó el gobernador. “Estamos cansados de que 6 millones de neoleoneses sufran porque a un empresario le vale y prende la chimenea en las madrugadas. Estamos hartos de que por uno paguen todos”.
Entre las acciones que ya no quedarán impunes destacan:
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Emisiones contaminantes (industrias que incumplan normas).
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Tiradero de basura ilegal.
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Maltrato animal.
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Incendios provocados.
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Grafiti en espacios públicos.
Basta de vandalismo: tolerancia cero
El mandatario también expresó su indignación por los actos vandálicos contra el Metro de Monterrey, donde nuevos vagones han sido rayados incluso antes de entrar en servicio.
“Estamos hartos de gente mal educada que sigue aventando basura, de quienes grafitean vagones que nos costaron millones y tardaron años en llegar”, señaló. “Antes esto era tierra de nadie, pero ahora habrá consecuencias”.
Un cambio histórico en la política ambiental
García Sepúlveda aseguró que, a diferencia de administraciones pasadas, su gobierno no permitirá que las leyes ambientales sean “letra muerta”.
“Los siguientes tres años seremos contundentes. Los delitos ambientales ya no quedarán impunes; habrá cárcel para quienes violen las normas”, recalcó.
Con estas acciones, Nuevo León busca proteger su entorno y garantizar una mejor calidad de vida para sus habitantes, enviando un mensaje claro: quien contamine, pagará las consecuencias.
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